#1

No he vuelto a soñar, digo, cierro los ojos y si me duermo, pero no sueño.

Ese mundo paralelo al que nos adentramos de noche se va vuelto otra fantasía mas.

Porque sabés, es real todo lo que ocurre cuando cierro mis ojos.

Lo que sueño es real, mi otro mundo, quién dijo que las cosas tienen que ser tangibles para ser verdaderas. ¿Te enojás? ¿Llorás? ¿Amás? ¿Por qué? Porque sentís, yo también siento, aquí y allá. Lo que siento y recuerdo lo hace verdad.

Mentira que ahí todo es perfecto. No. A veces me despierto con una sonrisa de oreja a oreja, otras veces con la cara húmeda por las lágrimas que salían de mis ojos, porque sí, puedo sentir tristeza ahí al igual que felicidad. Lloro de alegría y aflicción, pero existo y vivo a donde sea que vaya. 

Que caso tiene cerrar los ojos en la noche para apagar el cuerpo, para dejar de ser. Son tan vivos los recuerdos al despertar como lo son los de aquella tarde cuando pude saborear el tercer café del dia en tus labios. La vida en los sueños no se acaba hasta que esta también lo haga.

No he vuelto a soñar, y esto no significa que no vuelva a hacerlo. Despierta imagino lo que sería cerrar los ojos y cambiar historias, esperando volver a estar ahí. Mi mente sabe cuando dejarme entrar nuevamente, y yo espero. Yo se que existe y está ahí, ese mundo cierto. No he vuelto a soñar, pero voy a volver a hacerlo.