sin avisar volví, pero solo a vinear.
La verdad es que no quería quedarme, solo dar una vuelta
a ver si las cosas siguen igual, y así parece.
Una tarde jugando ping pong
aprendiendo los nuevos acordes en aquella guitarra que tenia guardada hace meses.
No encuentro en donde esconderme
si cada vez que lo hago aparece tu imagen en mi mente.
Caída libre, desde arriba se pueden ver todos los peces.
La distancia se hace mas grande cada vez
si caemos depende de la rapidez si me doy cuenta o simplemente llego al suelo.
Solo quedo una prenda,
que sera que es lo que me acuerda
todavia tiene su olor, y me transporta a aquellos momentos.
No encuentro en donde esconderme
si cada vez que lo hago aparece tu imagen en mi mente.
Ya tenia polvo esa guitarra, la de las cuerdas errumbradas,
como pasa el tiempo, y nuevamente esta volviendo a esa imagen.
Soy pesima jugando ping pong, nunca te gane y nunca me ganaste, nunca jugamos.
Quedan en mi mente los gritos de extasis musicales que al salir de aquella boca
se mezclaban con el humo y los aplausos.
No encuentro en donde esconderme
si cada vez que lo hago aparece tu imagen en mi mente.
Lo repito nuevamente
facilmente
a como vienen mis pensamientos
de repente.
Quiero esconderme
Quiero esconderme
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