El era una sombra en una esquinasentado en la silla azul.
Su apariencia no resaltaba en lo absoluto.
De negro
siempre
de negro.
Un cigarro, prestado
una, dos, otra, cuatro cervezas
y un whiskey.
Una, dos, otra sonrisa.
Una despedida,
sin antes habernos conocido
No comments:
Post a Comment